INGREDIENTES:
- 400 ml. de leche
- 75 gr. de azúcar
- 2 sobres de preparado para flan
- 54 galletas rectangulares (apróximadamente)
- Leche para mojar las galletas
- 200 gr. de chocolate para postres
- 200 ml. de nata líquida para montar
- 15 gr. de mantequilla
- Molde de 29 cm x 20 cm
PREPARACIÓN:
Coloca un poco de leche, a temperatura ambiente en un recipiente y disuelve los sobres de flan removiendo muy bien hasta que no quede ningún grumo. Coloca el resto de la leche en un cazo y llévalo al fuego junto con el azúcar y espera a que hierva. Cuando empiece a hervir, vierte la mezcla del flan y remueve con las varillas hasta que espese. Una vez que haya espesado, retíralo del fuego.
Vierte un poco de leche en un cuenco y moja las galletas una a una. Tienes que mojarlas rápido para que se empapen, pero que no se empapen demasiado. Coloca las galletas en una fuente rectangular cubriendo toda la base. Si te queda algún hueco, parte trocitos de galleta para que quede la base cubierta por completo.
Vierte la mitad del flan, aproximadamente, sobre la base de las galletas. Extiéndelo bien con ayuda de una espátula. Cuando tengas el flan bien extendido, coloca otra capa de galletas mojadas en leche. Procura que queden bien juntas y, como en el paso anterior, que no queden huecos.
Termina de verter todo el flan y extiéndelo bien con la espátula. Acaba la tarta con una tercera capa de galletas y reserva.
En un cazo calienta la nata al fuego sin que llegue a hervir. Una vez caliente, añade el chocolate troceado y la mantequilla remueve hasta que se derrita por completo. Vierte la mezcla sobre la última capa de galletas, extiéndelo bien con la espátula. Cuándo se enfríe guárdalo en la nevera durante al menos cinco o seis horas para que cuaje bien. Aunque si preparas la tarta el día anterior quedara con una textura más firme.
